DEPILACIÓN LÁSER
La depilación con láser es un método con el que se elimina el pelo del cuerpo mediante la utilización de esta tecnología. Los parámetros del láser se definen cuidadosamente estudiando la anatomía del folículo piloso y haciendo coincidir su luz y su duración con el tamaño del folículo, para inhibir el crecimiento del pelo.
Este sistema de depilación consiste en la emisión de una fuente de luz que atraviesa la piel hasta llegar al folículo piloso, siendo absorbida por la melanina que se encuentra a este nivel. De esta manera la energía luminosa calienta la matriz del vello y del folículo piloso, provocando su destrucción. Es un método rápido y cómodo que consigue una depilación duradera y en muchos casos definitiva.
Qué pieles se tratan:
Se tratan todos los tipos de piel desde la piel blanca, que no se broncea, hasta pieles oscuras y bronceadas (previa revisión médica)
Qué zonas se tratan:
La depilación con láser es un método seguro, rápido y eficaz para la eliminación del vello no deseado. Se puede aplicar a casi cualquier zona del cuerpo: extremidades, tórax, espalda, hombros, cara, axilas, ingles, zona perianal y genitales externos, etc. También se trata foliculitis de la barba y de la región de los genitales externos.
Resultados:
Se obtienen resultados visibles tras la primera sesión, aunque son necesarias 5 a 8 sesiones para obtener una reducción de folículos pilosos de un 70-80% aproximadamente. Las sesiones se pueden realizar en intervalos de 6 a 8 semanas.
Está contraindicada de forma absoluta en los siguientes casos:
Piel bronceada (con exposición al sol en el último mes).
Fotosensibilidad por enfermedad o por fármacos (reacción cutánea anormal que resulta de la exposición al sol o por fármacos).
Tratamiento con retinoides (tratamiento del acné, suspender tratamiento 7 meses antes de depilación láser).
Área ocular (salvo protección adecuada).
Áreas con neoplasia (proceso o tumor maligno o benigno).
