Las discrómias (manchas) de la piel pueden ser de distinta naturaleza y corresponder a procesos muy diversos. Las manchas oscuras de la piel aparecen en cualquier momento de la vida de mujeres y hombres, aunque las mujeres están más predispuestas a desarrollarlas. Los latinos, por ejemplo tenemos más predisposición a tener pecas y manchas. Actualmente los tratamientos Láser son una excelente herramienta para atenuar cualquier tipo de mancha. Según el caso particular de cada paciente se determina cual es el equipo ideal para lograr los resultados más efectivos. En la mayoría de los casos se utiliza el tratamiento láser para despigmentar las capas dérmicas más profundas y al mismo tiempo mejorar la textura, cerrar poros y dar más vitalidad a la piel. Disminuir las manchas de la piel es una estrategia de rejuvenecimiento muy efectiva, el cambio en la imagen es notorio y muy satisfactorio para los pacientes. En Dermalaser, se hará un diagnóstico correcto del tipo de mancha, en todos los casos se examinará la lesión con equipos de diagnóstico para observar la profundidad de la misma. Teniendo resultados luego de las cinco primeras sesiones.
REJUVENECIMIENTO CUTÁNEO
Las fotolesiones inducidas por la luz ultravioleta durante prolongadas exposiciones al sol aceleran y magnifican los cambios fisiológicos del proceso normal del envejecimiento. La exposición ultravioleta produce cambios degenerativos como la pérdida del colágeno con agrupamiento anómalo de las fibras elásticas en la dermis superficial, correlacionándose clínicamente con arrugas, laxitud, decoloración amarillenta y telangiectasias. El rejuvenecimiento cutáneo facial con uno de nuestros equipos no agresivos indicado en pieles con lesiones leves de envejecimiento, actúa calentando de forma preferencial la microvasculatura de la dermis, estimulando la formación de nuevas fibras de colágeno que se encuentran a este nivel. Esto mejora la textura y la firmeza de la piel atenuando las arrugas finas, disminuyendo el tamaño de los poros, devolviendo a la piel luminosidad y reduciendo el enrojecimiento disperso de la cara. Es un procedimiento rápido y no doloroso, pudiendo el paciente incorporarse a sus actividades diarias de forma inmediata.